Unos días arriba. Otros abajo. Mi ánimo viaja en una montaña rusa y en estos momentos mis pensamientos no son demasiado positivos.
La rodilla me duele. El tobillo parece que se inflama con solo mirarlo. Y ayer el fisio me comentó que la semana que viene empezaría a hacer algo de trote o bici para ver que tal responde todo. Al preguntarle que pasaría si continuo con los problemas, me comentó que deberé empezar a pensar en hacerme una resonancia, por lo que sospecho que no las tiene todas consigo.
Por lo que supongo que la semana que viene va a ser la prueba de fuego y esto no tiene pinta de haber mejorado mucho.
Mientras tanto sigo con el entrenamiento de natación y pesas para la parte superior del cuerpo. Intento retrasar al máximo la pérdida de forma por si...
Por cierto, este pasado sábado hice una sesión de 1 hora de estiramientos en el gimnasio donde entreno. Lo recomiendo a todo el mundo. Solo diré que al acabar me sentía más relajado, más ligero, más alto, más flexible...
Y para intentar levantarme el ánimo, una canción de Apollo 440 que me ha acompañado unos cuantos kilómetros entrenando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario